Más de 1000 jóvenes en los campamentos de Fasta Argentina

Después de 6 años, los jóvenes del movimiento volvieron a encontrarse en las tradicionales actividades de verano.
Jóvenes de Fasta Argentina en los campamentos

Después de 6 años, los jóvenes del movimiento volvieron a encontrarse en las tradicionales actividades de verano.

Los años de pandemia y el intervalo entre los campamentos regionales y nacionales hicieron que durante seis años no se pudiera realizar éste tipo convocatoria que invita a participar a los jóvenes de las distintas provincias de argentina en donde se encuentra Fasta.

Los menores volvieron a armar sus carpas

Iniciando el 2023 y bajo el nombre “Apóstoles en marcha”, se reunieron del 6 al 15 de enero los jóvenes de entre 10 y 18 años de los rucas (centros juveniles) en distintas localidades de la provincia de Córdoba. 

Con motivo de celebrar el jubileo de Fasta los varones visitaron la localidad de Alpa Corral para conocer más sobre la historia de Fasta. El jefe de campamento Mil. Iván Di Memmo comentó “volvimos al lugar del primer campamento para plantearnos, después de 60 años, cómo es que recibimos la herencia que el Padre Fundador nos ha dejado y asumir la misión que hoy nos toca de ser testigos y salir a anunciarla”. Además agregó “las ganas con las que nos volvimos a encontrar nos sirve para confirmar que esto que hacemos es bueno, gusta y atrae”.

A su vez, el campamento de las mujeres había comenzado con algunas complicaciones  para encontrar el lugar adecuado, pero la providencia de Dios actuó y finalmente, luego de rezar una novena a la Virgen, surgió la posibilidad de hacerlo en un pequeño pueblo, vecino a Río Cuarto, llamado Santa Catalina. “Durante los primeros días de campamento, los capellanes, Padre Enrique Silvano y Juan Marccheti, se acercaron a la parroquia del pueblo, y al charlar con el diácono del lugar quien les comentó que allí había una reliquia de primer grado de Santa Catalina. Sin dudas un signo de que este pueblo había sido pensado hace tiempo para nosotras y que nuestra patrona nos estaba esperando para volver a incendiar nuestros corazones”, contó la Mil. Antonella Ferrari, jefa del campamento .

Conocer para difundir la Verdad es el desafío que asumieron los jóvenes universitarios

Por su parte, los universitarios tuvieron el campamento nacional “Veritas” en Villa Allende, Córdoba del 15 al 23 de enero con el objetivo de profundizar el conocimiento sobre la Verdad y motivar el gusto por el encuentro con ella.

La jefa de campamento, Mil. Camila Medina explicó “buscamos dar a conocer la Verdad en sí misma, la Verdad completa: Cristo, la Verdad que salva. La verdad amada, estudiada, contemplada, vivida, predicada y defendida, como hemos heredado de nuestra espiritualidad dominicana”. Además agregó “el conocimiento y la difusión de la verdad es la tarea principal del cristiano de todos los tiempos, puesto que es la tarea que se fijó Cristo, quien vino al mundo para dar testimonio de la Verdad”.

Este campamento tuvo como novedad ser el primero con el renovado Programa Ciudadanos, en el que se incorporaron las acciones apostólicas. “Durante el año los rucas llevaron a cabo en sus ciudades acciones con el fin de transmitir la Verdad a distintos ámbitos de la sociedad. En estos días pudimos conocer los proyectos que llevan a cabo 15 agrupaciones en todo el país”, detalló Camila.

Los jóvenes disfrutaron y compartieron varios momentos como los fogones, las salidas culturales, las misas, los espacios de reflexión, de contemplación, de formación, pero sobre todo de amistad miliciana.

El campamento, símbolo de Fasta

Desde sus orígenes la Fraternidad de Agrupaciones Santo Tomás de Aquino (Fasta) realiza campamentos donde se reúnen los jóvenes con el fin de compartir con el otro y vivir en comunidad momentos de alegría, juegos, amistad, reflexión y oración, en medio de la naturaleza.

El primer campamento nacional “Nuestra Señora del Rosario”  se realizó en 1963 en la pequeña localidad de Córdoba de Alpa Corral, apenas tres meses después de haber sido fundada la institución.

Dentro de los símbolos de Fasta, el campamento es de gran importancia ya que es un espacio privilegiado para vivir la fe. A través de la renuncia a los placeres y las comodidades de la vida cotidiana se enseña a vivir una vida más austera que ayuda a purificar el corazón y encontrar a Dios en las pequeñas cosas.

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