Una Ciudad que (se) comunica
El Dr. Alejandro Campos, Vicepresidente Ejecutivo de Fasta, destacó la importancia de entender al hombre de hoy y la civilización que lo rodea para llegar a ellos con el mensaje de Cristo.
“Para que nos entienda ese hombre, para que la llegada de Cristo sea eficaz, tenemos que entender su lógica, su inteligencia, sus códigos y su modo de abordar el cosmos. Sino lo entendemos nos quedamos hablando solos”.
Para comunicar, hoy debemos poner a la persona en el centro y escuchar con el corazón.
Post pandemia y la comunicación
El Mil. Leandro Vélez, inició su charla con la siguiente afirmación “el mundo está sediento de Dios, como nunca. Cuando vos hablas de misericordia la gente abre los ojos”.
Luego de la pandemia, que ha sido el corolario de una gran cantidad de procesos que se venían gestando desde antes, todos quedamos expuestos a la tecnología de una forma diferente. El hombre está intoxicado de información, la gente está cansada y nosotros somos un mensaje más.
Los comunicadores tenemos el desafío de hacer que toda la comunidad comunique bien. Se logra una buena comunicación cuando uno trasciende las herramientas simplistas. Es decir, lo más importante para comunicar es la alegría y eso se hace de persona a persona. Porque si crees que no es así, te pregunto a vos… ¿qué flyer te llegó al corazón?
Síntomas y comunicación. Una mirada sobre la relación signo realidad.
El Lic. Fabrizio Zotta, Decano de la Facultad de Periodismo y Comunicación de la Universidad Fasta, propuso pensar la comunicación desde lo que está diciendo la cultura actual, lo que ya ha dicho la ciencia sobre la comunicación, y a partir de lo que dice el Papa Francisco. Una vez analizado esto podremos responder la siguiente pregunta ¿qué hacemos como comunicadores con esto que está pasando?
Habiendo presentado algunos síntomas de la comunicación contemporánea explicó “la comunicación actual, aunque parezca horizontal y permanente, sigue necesitando el contacto. El contacto entendido como lo entiende Francisco, el contacto físico y el tacto en la forma, en cómo lo hacemos (…) Estamos en un momento de refundar la comunicación, de re-entederla”.
Hay que tomarse el tiempo no para hacer comunicación sino para pensarla. Estamos en el momento de “conocer para producir”.
Encuentro con la Agencia Éremo
El fundador y director de la Agencia Éremo, Francisco Oliden, transmitió la importancia de asumir la misión de comunicador como aquel apostolado que se nos ha encomendado, en un lugar y un espacio determinado.
“Dice Pablo IV: nos sentiríamos culpables delante de Dios sino utilizáramos estos poderosos medios para evangelizar (…) Son medios que se nos han dado, que tenemos a nuestro alcance, que nosotros podemos y tenemos que usar. Es una responsabilidad, es una misión, es un llamado de Jesús. Él, que podría llegar a las almas se vale de nosotros para llegar a ellas”.
Somos apóstoles, como San Pablo, a los ámbitos de la comunicación para también, como San Pedro, pescar hombres y mujeres, hacer discípulos de Jesús para que otros puedan conocerlo más, amarlo más y servirlo más.
El Fundador en el corazón de la Ciudad
El Mil. Silvano Penna, Director General del Movimiento, invitó a los comunicadores a asumir el compromiso de hacer presente en el corazón de la Ciudad Miliciana, la vida, la obra y la doctrina de nuestro Fundador, Fray Aníbal E. Fosbery. “Cada uno, desde su ámbito y en su espacio, debe colaborar para mantenerlo vivo, en la memoria y en la conciencia de las generaciones presentes y futuras”.
Luego de recorrer la historia y trayectoria del Padre Fundador, planteó la siguiente pregunta para que cada uno pudiera reflexionar: ¿el Espíritu lo eligió ya joven, por esos tonos personales, y en él sopló?; o bien, ¿el Espíritu lo forjó desde la eternidad, preparándolo para soplar en él la Gracia hecha Carisma?