En consonancia al recorrido formativo que se encuentra realizando la Comunidad de Escucha y Acompañamiento de Fasta, el Dr. Eduardo Cuvertino, miembro de dicha comunidad, realizó del 20 al 31 de mayo el Diplomado online “El Trauma por abuso sexual, de poder y de conciencia en la Iglesia”.
El mismo estuvo orientado a la reflexión sobre la realidad del trauma en la sociedad y en la Iglesia, a reconocer las consecuencias traumáticas que viven las personas que sufren alguno de estos tipos de abuso y a tomar conciencia que todos somos necesarios en el proceso de sanación y atención integral a las víctimas.
Luego del recorrido formativo realizado en los 10 días, Eduardo (Titi) Cuvertino, comentó “la experiencia de este encuentro multidisciplinario ha significado un verdadero testimonio de comunión en este peregrinar que realiza la iglesia acompañando a quienes llevan heridas vinculadas con diferentes tipos de abusos y que han afectado su experiencia de fe”.
Luego agregó “tenemos a un Dios “informado en trauma”, que ha vivido esta experiencia en el Cristo encarnado. Por esto, el acompañamiento supone reconocernos vulnerables y al mismo tiempo crecer en la misericordia y en el cuidado, porque Dios nos ha creado, porque somos amados y somos cuidados por Él, y esto requiere una respuesta de amor recíproco: al igual que Dios, debemos cuidar y ser cuidados”.
“Se hace imprescindible transitar hacia la modificación de estructuras esenciales en las que muchas veces no se puede llegar al corazón de las personas. Y edificar sobre tres aspectos que ha señalado con firmeza el Santo Padre Francisco: el primero, transitar hacia una Espiritualidad del cuidado, nacida desde abajo, encarnada en la imitación al buen pastor; el segundo, promover una autoridad para el servicio y el cuidado, que acompañe, asista, motive y proteja a cada persona, poseedora de intenciones, necesidades, deseos y estados afectivos que pueden ser adecuadamente compartidos; y el tercero, procurar autenticidad en nuestras comunidades, para que nadie se aleje con heridas”.
Finalmente explicó “esto es promover relaciones y comunidades para el cuidado, donde la empatía, la conexión, la confianza, la autonomía, el amor y la sexualidad sean realmente protegidos por un proyecto común. En cierto sentido, significará reprogramarnos en las relaciones, ambientes y espiritualidad comunitaria, para recuperar el equilibrio reconociendo límites, sentido y trascendencia de cada uno”.
De acuerdo al carisma institucional la Comunidad de Escucha y Acompañamiento otorga a la formación un rol central, en éste caso como un medio clave para avanzar en una cultura del cuidado de la persona en las instituciones adquiriendo cada vez mayores competencias para la prevención y el acompañamiento de casos de abuso y el desarrollo de ambientes sanos y seguros.
La oferta de formación del Ceprome Latinoamérica (Consejo Pastoral para la Protección del Menor) propone en la actualidad 3 diplomados en el marco de la prevención y el acompañamiento de casos de abuso.