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Inició la segunda etapa del Proceso de Autoconciencia Eclesial

Se presentaron los resultados y conclusiones de la primera etapa. El Directorio Ampliado realizó el taller “Buscando respuestas”.

En el marco de la reunión mensual del Directorio Ampliado, la consultora Analipsis encargada de llevar a cabo el desarrollo metodológico del proceso de Autoconciencia Eclesial, propuso un segundo taller diseñado específicamente para este órgano de conducción.

El mismo, constó de una primera instancia donde presentaron las conclusiones que arrojaron los 22 talleres “abriendo cajas” que se realizaron en las distintas comunidades y de los cuales participaron más de 500 personas. Con la dinámica propuesta de abrir cuatro cajas por taller, en total se abrieron 88 que generaron 2.200 tarjetas.

La consultora informó los ejes salientes de esta primera etapa entre los que se destacan: preocupación por el estado de la espiritualidad del hombre del siglo XXI; debilidad de los vínculos familiares; liderazgos tradicionales debilitados, entre otros. 

Respecto a las palabras que más se mencionaron en los talleres fueron incertidumbre, preocupación, soledad, tristeza y miedo, pero estás han sido superadas/opacadas por la aparición constante de las palabras desafío y oportunidad. En relación a esto, las conclusiones evidencian una descripción crítica sobre los temas presentados en cada caja y una clara conciencia del retroceso de la valoración social de la cultura católica pero, ante esta realidad, surge una  latente necesidad de nuevas formas y canales de evangelización.

El taller “Buscando respuestas” invitó al Directorio a evaluar y proponer proyectos de acuerdo a ocho ejes: espiritualidad del hombre del siglo XXI, ecología, opciones por los pobres, familia en el siglo XXI, comunicación en la era digital, liderazgo en el siglo XXI, brechas actuales y cultura digital.

Hernán Toniut, director de la Consultora Analipsis, explicó “habiendo cerrado la etapa de diagnóstica abrimos el espacio de las iniciativas. Esto no significa que tenemos que hacer todos nuevos proyectos sino que podamos evaluar cuáles de las acciones que ya está realizando Fasta responden a la realidad en la cual está inserta y cuáles otras sería bueno implementar”.

La segunda etapa del proceso de autoconciencia enmarca a Fasta en el mapa de la cultura contemporánea y busca proponer acciones concretas orientadas a jóvenes, comunidades, obras educativas, nuevos areópagos y ámbitos de evangelización. 

En relación a la implementación metodológica y la participación para las jurisdicciones se presentarán próximamente otras herramientas que les permitirán hacer una evaluación y proyección en sus comunidades.

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