La comunidad de Fasta Resistencia celebró su primera década con el campamento “Deus Vult”. La actividad fue un hito para la historia de esta comunidad ya que en ella se oficializaron los primeros cinco milicianos, culminando, así, de alguna manera, la etapa fundacional, iniciada en el 2014.
Los milicianos que asumieron el compromiso de contemplar, construir, sostener y proteger la Ciudad Miliciana son: Ilda Beatriz Dellamea de Gentile, Sandra Alonso, Miguel Franco, Cristina Chemes y María del Carmen Morales Lezica.
Actualmente Fasta Resistencia cuenta con dos convivios; el Ruca Cupaí Pora, con su incipiente Agrupación de Padres del Ruca; y funciona la Unidad de Apoyo Académico de la Universidad Fasta, con una nueva sede más amplia recientemente inaugurada. Asimismo, los miembros de la comunidad participan activamente de las actividades nacionales y regionales que se proponen tanto para los jóvenes como para los adultos, como por ejemplo en el pasado Encuentro de Mujeres de la Ciudad, donde asistieron cinco milicianas de Chaco.
El Espíritu Santo sopló y los misioneros fueron instrumentos del amor de Dios
La Fundación de la comunidad de Fasta Resistencia se debe de manera especial al llamado que le hizo Dios a Ilda Dellame y a su esposo Fernando. Ellos conocieron a Fasta desde hace algunos años por haber participado de los Congresos de Filosofía del Derecho y de la Escuela de Humanidades. Fue a partir de ese contacto que se enamoraron del carisma de Fasta y lo quisieron llevar hacia Resistencia, provincia de Chaco.
Durante un par de años Ilda participó de las reuniones de Presidentes Jurisdiccionales como invitada de la Dirección de Organización Institucional. En este tiempo muchos milicianos viajaron para ir “preparando el terreno”. Entre ellos se encontraban Pedro Giunta, como Director del Movimiento, Nazareno Garófoli ,el Padre César, así como jefes regionales y otros milicianos como Matías Castro Videla y Alejandra Boggione. Una vez consolidados los primeros cimientos, se realizó un campamento con ayuda de jóvenes que viajaron desde Tucumán.
En el 2014 y viendo que el Espíritu Santo soplaba para que la Fundación se pudiera concretar, Fasta envió los primeros misioneros que fueron acogidos en la casa de Ilda y Fernando quienes asumieron el papel de “padres” consiguiéndoles trabajo, supervisando sus estudios y prestándoles un terreno propio para hacer actividades. El primer sábado fueron solamente 6 milicianos entre los que se encontraba Luciano Gasparini, quien fue el Jefe del campamento “Deus Vult”.
Con un importante apoyo de la Región Norte, de la Organización de Juventudes y luego, en el 2016 con el nacimiento de la Dirección de Promoción Apostólica, se fue fortaleciendo el crecimiento del Ruca con el envio de nuevos misioneros hasta fines del 2019. Durante este tiempo la comunidad también fue visitada por la Cath. Ofelia Giunta y por el Padre Fundador, Fray Aníbal E. Fosbery compartiendo actividades y encuentros con ellos.
Los misioneros que pasaron por esta comunidad son Candelaria Tolaba, Florencia Barrios, Diego Bonilla, Irina Sánchez, Laura presinski, Juan Ignacio Coronel, Teresa Terán, Lourdes Pirani, Maxi Barreras, Adrian Ortiz, Santiago Fernández, laila Canteros, Agustina Aches y Franco Catania.
El fervor de los chicos contagió a los padres, y los adultos comenzaron a sumarse. Han participado de los albergues que se organizaban en San Martín de los Andes para la Organización Mayor y de las Marchas del Varón de las distintas provincias, Así fundaron su primer convivio.
La tarea apostólica de los misioneros ha sido fundamental para que Fasta Resistencia pudiera iniciar y luego seguir su propio camino. La dedicación, el sacrificio, la entrega y el amor a Cristo que supieron transmitir cada uno de ellos se refleja en una comunidad que ama lo heroico y lo difícil.